Mick Jagger cuatro veces en Perú: de incógnito en la tropical Madre de Dios

Fue nombrado en 2011 huésped ilustre, embajador turístico y protector del medio ambiente. Conoció la Reserva Nacional Tambopata-Candamo, cerca de la cual se hospedó en la Hacienda Concepción, alojamiento ecológico que declaró oficialmente inaugurado. Su eterno amigo peruano es Joe Koechlin

Por Ítalo Sifuentes Alemán

Desde el siglo pasado, una de las personalidades más asidua a diversos territorios peruanos es el legendario rockero británico Mick Jagger, de 81 años, a quien se vio frenético en la reciente 97 edición de los premios Oscar. Ha estado en cuatro oportunidades en el Perú, una de ellas algunos días de incógnito, pasando desapercibido, solo al alcance de sus amigos. Las visitas sucedieron de 1969 a 2016. En esa cantidad de años visitó el icónico Machu Picchu, donde se dejó registrar en algunas fotografías, así como en la exuberante Madre de Dios, la aventurera Loreto, y la díscola Lima, entre otras localidades rurales y urbanas en las que disfrutó la calidez de la gente, el paisaje y la gastronomía, cómo no.

La última vez que Mick Jagger estuvo en Perú fue en 2016, con su banda Rolling Stone. Dio un memorable concierto en la capital de los peruanos. En ese evento tuvo varias expresiones amigables dirigidas a la concurrencia multi etárea, de todos los oídos, de todos los colores, de todos los sentimientos.

A continuación, presento una cronología de las visitas de Mick Jagger al Perú, la cual es posible gracias a la investigación y al siempre generoso Joe Koechlin, su casi coetáneo y eterno amigo peruano, reconocido empresario ecoturístico, fundador de Inkaterra allá por 1975, a quien conozco desde los años noventa. Va la secuencia:

1. 1969: procedente de Río Janeiro, Mick Jagger llegó al Perú con Keith Richards y la esposa de este, Anita Pallenberg, modelo y actriz con la que, en 1968, Mick Jagger había actuado en la película Performance. La mítica banda rockera Rolling Stone, ícono de la contracultura, había sido fundada en 1962. Entre otros lugares, conocieron las playas de Ancón, balneario concurrido en ese entonces por el jet set internacional.
2. 1981: llegó para participar como actor en Fitzcarraldo, película del director alemán Werner Herzog, terminada de grabar con los actores Klaus Kinski y Claudia Cardinale, la cual se estrenó al año siguiente. Mick Jagger conoció ese año la exuberante Iquitos, donde se rodaba dicha película, y entre los peruanos que conoció estuvo José (Joe) Koechlin, quien, al apoyar la producción de este filme, terminó colocando al Perú en las altas vitrinas extranjeras.
3. 2011: Viernes, 14 de octubre. Mick Jagger recorrió Machu Picchu acompañado de su novia Lauren Scott y de su menor hijo, de 12 años de edad. A Lima había llegado la noche del día 7. Por casi 4 días estuvo de incógnito en la selva virgen de Madre de Dios, donde fue nombrado huésped ilustre, embajador turístico y protector del medio ambiente. Conoció la Reserva Nacional Tambopata-Candamo, cerca de la cual se hospedó en la Hacienda Concepción, alojamiento ecológico que declaró oficialmente inaugurado (propiedad de su amigo Joe Koecklin). Fue un orgullo que Mick Jagger lo hiciera, muchos desconocen este histórico hecho del que existen varias fotografías todavía inéditas. En Cusco, el 12 de ese mes, en el aeropuerto Alejandro Velasco Astete, con los trabajadores que se acercaron a saludarlo, el rockero también se tomó risueñamente unas fotografías. Para aquel viaje utilizó un avión privado. El jueves 13, al poblado de Aguas Calientes, llegó en tren y se alojó en Machu Picchu Pueblo Hotel. La prensa lo fotografió recorriendo dicho santuario arqueológico, acompañado de sus familiares y amigos, entre ellos Joe. Mick Jagger tenía 68 años cuando, ese año, visitó el Perú.
4. 2016: la legendaria banda Rolling Stone dio, el domingo 6 de marzo, un memorable concierto ante 50 mil espectadores, quienes saltaron de alegría cuando, en el estadio Monumental, Mick Jagger exclamó: “Lima es paja”, resumiendo así una relación de más de cinco décadas plenas de satisfacción (con el Perú) y simpatía (ya no solo con el diablo).